10 años después...
Gargantas expectantes, ansiosas por una noche de delirio. Un escenario apagado, conocido, casi familiar, y frente a éste, la emoción se respira en el aire. Esos primeros minutos con una percusión que hace vibrar las paredes inician la fiesta. Dan inicio al "Solar de Sara" como nunca antes. Diez años encima y las mismas ganas de sentirlo igual o mejor que la primera vez.
-"Antes de las 9 sino me voy"- cierro el mensaje y quedo con Marcelo para salir juntos (otra vez) rumbo al concierto.
- "Estoy a unas cuadras de tu casa. Por dónde voy" - pregunta Manuel buscando una casa, mi casa.
- "Ya bajo" - y al final quien se supone esperaría, los hace esperar.
Son las 9:00 pm, el auto listo y enrumbado hacia Barranco lleva a 3 fanáticos de GAIA al encuentro postergado por semanas. Uno, por trabajo; otro, por la distancia; y el tercero, porque no hubo encuentros anteriores.
La conversación no fue muy larga porque mi pie en el acelerador no lo permitió, iba a llegar tarde (obviamente no) y en mi mente obsesivo-compulsiva no cabía la posibilidad de no estar primero en la fila del concierto. Como era de suponerse, no llegamos tarde. El ingreso a La Noche estaba vacío y para no hacer roche, un trago en una esquina estratégica que no nos haga perder de vista el lugar donde tendríamos que hacer la cola.
Marcelo saca su juguete nuevo -una GOPRO que pudo durarle solo un día gracias a mis torpes manos- y se convierte en la vedette de la tertulia en esa mesa fría de madera que sirve de decoración en un ambiente donde aquella puerta pesada al fondo, también de madera, representa el acceso a lo que hemos esperado con ansias.
De pronto, de aquella puerta de madera, una escuálida figura aparece como pidiendo permiso para salir. Una mirada perdida se cruza con la mía y se acerca a nuestra mesa. Era nuestro amigo Ricardo Barrera (Maldición! -pensé- este pendejo llegó antes que nosotros!!) quien emocionado nos cuenta que forma parte del staff de GAIA. Las felicitaciones respectivas y el orgullo personal por saber que un miembro de la Órbita se convierte en uno de los responsables de que todo funcione perfectamente. Ricardo vuelve a esconderse tras la puerta de La Noche, con la felicidad que no le cabe en el cuerpo (¿algo le podría caber a ese cuerpo?). Bien merecido Ricardo!
La conversación nos hizo olvidar nuestro objetivo: la fila para ingresar. Antes de darnos cuenta, un par de infelices ya estaban apostados cerca a la puerta de acceso y como si un resorte nos hiciera saltar de nuestros asientos, terminamos tercero, cuarto y quinto en la fila.
10:00 pm, la fila iba creciendo y con ella, las ansias por ingresar. La Negra no hacía su aparición y la señora de acento español vuelve a asustar a todos pidiendo DNI. De pronto, la imponente presencia de La Negra nos dice que esto al fin empieza.
El escenario vacío, testigo de innumerables batallas musicales entre los ensordecedores gritos del público y el rugir de los instrumentos que desde esos parlantes se transforman en una melodía única, nos recibe para iniciar otra gran contienda.
Observo detenidamente el ambiente, GAIA siempre tiene algo nuevo que mostrar. Un fondo rojo con trazos hipnóticos sirve de escenografía y sobre él, las alas celestiales de "La Teoría de Volar", las alas que siempre quise y nunca pude obtener. Todo milimétricamente organizado. Todo hacía presagiar que este sería un concierto diferente, y así fue.
La Órbita va llegando, el ambiente va calentando, los espacios vacíos reduciéndose y solo queda esperar.
La música de fondo se detiene, las luces se apagan y los gritos de emoción acompañados de aplausos ávidos de rock le dan la bienvenida a GAIA. Todos en sus lugares y empieza la explosión. Se encienden las luces y una hermosa dama aparece frente a mis ojos. Unas congas delante de ella la hacen más hermosa aun. Es Leslie Patten, quien sorprende a todos acompañando a GAIA mezclando su talento en "Párate". Era la primera vez que escuchaba esta canción en concierto y la percusión en vivo en otra cosa. Genialidad.
El concierto fue un calco del álbum. Las canciones siguieron el orden del disco, y al igual que éste, iba cambiando las revoluciones a su antojo en cada canción. "Q'enqo" inicia con una potencia indescriptible. El público lo sintió y no se quedó atrás. NACI-DO BAJO EL SIG-NO DE LA LUNA!!!!
"La Nueva" fue el deshueve y el techo era el límite. Para no destrozar el local, nos ponen a bailar con "Aire Por Consumir" y seguimos bajando con "Adicción Distancia", ambas acompañadas nuevamente con la belleza, no solo musical, de Leslie Patten. "Terrestre" nos vuelve a prender y "Bálsamo" nos recuerda que GAIA dice más de lo que pensamos en cada letra. "24" es nuestra canción para cantar y saliendo del libreto y contra todo pronóstico, PQT toma la palabra. Fue tan sorprendente escucharlo hablar que el respetable hizo silencio absoluto. Una pequeña reseña de cómo descubre a "esa bandita" y cómo se engancha con ellos a través de "Migratoria". Llega "Oz" y la batería relajante de esa canción nos regala 3 minutos de paz total.
Luego llega nuestro himno y mis ojos siguen lo que mis oídos detectan. La batería empieza a tomar protagonismo en cada canción. "Órbita" y "Airthai" son solo el inicio de lo que vendría después. Aquel muñeco de Jigsaw (Billy para los amigos) colgando en uno de los platillos parecía tomar el control: "I wanna play a game..."
El final de la primera parte se acerca con "Descartable" y el riff final, eterno, nos va diciendo que el "Solar de Sara" termina, pero no el concierto. Cinco minutos de descanso y volvemos a empezar.
YORCH EL INCONTROLABLE
Los 5 minutos fueron largos para un público que había recibido demasiado. GAIA regresa al escenario y Yorch lleva puesto el polo de La Roja, el polo de la "Órbita". Tal vez sea mi percepción, pero ese polo parecía cargado de tanta buena vibra que lo que hizo Yorch desde ese momento fue realmente alucinante.
El examen final para Yorch llegó en ese momento. "Langosta" tocada de manera excepcional le dieron la cancha suficiente para meterse al bolsillo el concierto. Si se equivocó en alguna canción -particularmente para mi oído no muy entendido en eso- pasó inadvertido. El Yorch de esa noche no era el mismo de tocadas anteriores, tal vez la confianza que da la titularidad, tal vez la buena vibra de la banda, tal vez la tarea bien aprendida, hicieron que tenga bien merecido el apelativo de "Incontrolable" pues eso fue.
"S.A.M." en una versión distinta hizo que sintiéramos la canción de otra manera. Se convirtió en un reclamo masivo: HEY... NO ME INVADAS!!! HEY... NO ME INVADAS!!!
Las bombas iniciales de "Dispara" hicieron que este dolor de cuello siga mientras escribo y mi garganta quedara reventada. Mike toma una pausa y nos explica a través de "Escarlata" por qué lleva un rosario en la muñeca izquierda. Aquí, un momento GAIA, muy personal e imperceptible: Casi al final de la canción y antes de la mejor frase que he podido escuchar en una canción de GAIA, Mike me señala con el dedo como recordándome la importancia de esa frase y el valor que tiene para mí. Gracias Mike.
"Apolo" y "Rutera" nos van dejando sin aliento, sin voz y sin piernas, pero con tanta fuerza como para seguir estoicamente frente a ellos, esperando más. En cada pausa, un ebrio desde el balcón intentaba robarse el show, mientras GAIA festeja su locura etílica.
El concierto se acaba, "Pegaso" cierra estas maravillosas 2 horas de energía pura. Dos horas que fueron suficientes para plasmar lo que en 10 años GAIA ha logrado. Dos horas irrepetibles, inolvidables, únicas.
La gente se está yendo, los espacios vacíos van aumentando. La Órbita se dispersa y quedamos a la espera de aquellos héroes que hicieron la noche suya. Solo me quedo para felicitarlos, para agradecerles y pedirles un favor personal. Favor que se convirtió en compromiso y que ahora hace que una fecha muy importante para mí, tenga un valor especial.
No hay fecha para un próximo concierto, y esto nos compromete a todos a no bajar los brazos, a no dormirnos y a seguir empujando hacia el mismo lado. GAIA debe seguir creciendo. Desde esta humilde trinchera, intentaremos seguir sumando.
R'n'F'R'!!!
oye, te puedo pasar el número de los Integrantes de GAIA para que los llames si tanto te los quieres cachar.
ResponderEliminarEn serio harías eso!!!! Buena voz!!! A ver juégatelos.... Gracias x tu comentario, al menos demuestras que sabes leer
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